Campamento de Chicas
En la edición en que el Campamento Diocesano de Monaguillos cumplió veinticinco ediciones, dio comienzo el primer Campamento Diocesano de Niñas. Fue en la Colonia “Nuestra Señora de las Rivas” de Corporales, la semana posterior al de monaguillos.
Lo organizó la Delegación Diocesana de Vocaciones, como respuesta a varias demandas de hacer una experiencia, de este tipo, para chicas. Fue posible gracias a la colaboración de seis monitoras: Lorena Cordero, María de los Ángeles Sevillano, Lucía Gómez, María Rivera, María González y María Rodríguez. Gracias, a Dios y a ellas. Veintidós fueron las niñas inscritas, y el balance de acampadas, sus padres, monitoras y sacerdotes es bueno.
El lema del campamento: “La alegría de estar con Jesús”, y la figura sobre la que giró el campamento: San Juan Pablo II, fueron comunes para los dos campamentos. Los talleres fueron distintos: “Corporales FM”, “Boli enrollado” y “Decora tu camiseta”, y también los juegos. La vida espiritual fue intensa: ofrecimiento de obras, Laudes, Eucaristía, Ángelus, oración de la noche. El jueves tuvimos Procesión Eucarística por la Colonia y, el sábado, Rosario en la Ermita de la Virgen. Y, cada mañana, la motivación del día y la catequesis, venían de la mano de San Juan Pablo II.
También las chicas subieron al Cristo de Truchas, coincidiendo con el día de la Transfiguración del Señor; se bañaron en “las pozas” y aprovecharon la piscina de la colonia, se divirtieron, hicieron nuevas amigas…
Las catequesis del viernes y del sábado trataron la realidad de la vocación: la vocación cristiana, por Lorena; la vocación matrimonial de la que dio testimonio María Rivera y la vocación consagrada, que corrió a cargo de cinco religiosas Hijas de Santa María del Corazón de Jesús, que vinieron de visita al campamento.
El Domingo, día diez, finalizamos esta experiencia con el “Día de la Familia”: celebramos la Eucaristía, comimos en el patio todos juntos, compartimos la fiesta y los juegos, y las familias conocieron las instalaciones y las actividades llevadas a cabo en esos días.
Quiero dar las gracias a todos los que habéis hecho posible este primer Campamento Diocesano de Chicas: trabajando como monitoras, sacerdotes, seminaristas, los que habéis animado a vuestras hijas a participar, y los que habéis rezado por los campamentos.
El próximo año, Dios mediante, celebraremos este campamento entre los días 27 de julio y 2 de agosto. Apuntaos ya las fechas y animad a vuestras amigas a venir. Os pido que recéis para que lo sembrado estos días caiga en tierra buena y dé fruto de “treinta, el sesenta, o el ciento por uno”.
José Antonio Prieto Flórez, Delegado de Pastoral Vocacional.